El Padre Pío tenía un perfume muy especial y muchos pudieron sentirlo durante su vida, algunos decían que era de “violetas y rosas”, otros, de “jazmines y azucenas“, él decía que era algo que nos daba el cielo porque es “algo de lo que allá sobra”. Y ese es el regalo que él nos hace, ofreciéndonos perfumes espirituales que nos ayuden a llegar al cielo, sean violetas, jazmines, azucenas o rosas. Nosotros nos unimos al él como sus Hijos protegidos para restaurar todas las cosas en Cristo.
Diego Mauricio Duque
Director voluntario
Ramillete Espiritual del Padre Pío
El Padre Pío tenía un perfume muy especial y muchos pudieron sentirlo durante su vida, algunos decían que era de "violetas y rosas", otros, de "jazmines y azucenas", él decía que era algo que nos daba el cielo porque es "algo de lo que allá sobra". Y ese es el regalo que él nos hace, ofreciéndonos perfumes espirituales que nos ayuden a llegar al cielo, sean violetas, jazmines, azucenas o rosas. Nosotros nos unimos al él como sus Hijos protegidos para restaurar todas las cosas en Cristo.